La política, responsable de que España se haya colado en el TOP10 de los países con mayor igualdad de género
Escrito por: Irene Ballesteros
Al comienzo de cada año es habitual ver publicadas en los medios de comunicación listas y recopilaciones de los hechos más relevantes que han marcado los 365 días que acaban de terminar. Y una de las que más nos ha llamado la atención sobre 2019 es la que ha puesto sobre la mesa el Foro Económico Mundial en su Informe de brecha de género global 2020.
Según este estudio, España es uno de los países que más ha escalado en materia de igualdad durante 2019, por lo que ha entrado a formar parte del TOP10 de los Estados más igualitarios. En concreto, ocupa el puesto número 8, lo que significa que ha escalado 21 puestos (¡21 puestos!) en los últimos 2 años.
¿Cómo ha sido posible? Este informe analiza 4 áreas de actuación: la participación económica y oportunidades; el nivel educativo; salud y supervivencia, y, finalmente, el empoderamiento político. Y ha sido este último factor el decisivo para el espectacular ascenso en la lista de nuestro país.
El Foro Económico Mundial señala que, gracias al equipo de Gobierno que se conformó en la pasada legislatura, España se convirtió en el Ejecutivo con más ministras de Europa (el 61% eran mujeres), algo que también destacaron entonces los medios de comunicación y que abrió debates como el de si lo apropiado era hablar entonces de Consejo de Ministras en lugar de Ministros.
Estos días hemos asistido a la conformación de un nuevo Gobierno compuesto, en esta ocasión, por un presidente, 11 ministros y 11 ministras, por lo que, al menos desde este punto de vista, no parece que España vaya a perder posiciones en este TOP10 durante el recién estrenado 2020.
Sin embargo, y a pesar de que las conclusiones del informe son esperanzadoras para todos, lo cierto es que el simple hecho de que exista un ranking para medir la igualdad significa, de partida, que aún no la hemos alcanzado en otros muchos ámbitos ajenos a la política.
Así lo pusieron de manifiesto durante 2019 las multitudinarias e históricas marchas que se celebraron el 8 de marzo con motivo del Día de la Mujer y así lo corrobora, desgraciadamente, el propio Foro Económico Mundial, que asegura que, de seguir a este ritmo, la paridad mundial no se logrará hasta dentro de 257 años. En Europa Occidental la brecha podría cerrarse en 57 años: son menos, pero muchos en cualquier caso. Y no podemos esperar tanto. La igualdad no es un capricho ni una moda, es una necesidad.