El techo de cristal: sólo 2 mujeres CEO entre los 50 mejores de la última década
Escrito por: Ainhoa de la Hera
A principios de este mes de febrero, Forbes publicaba su famosa lista de los 50 mejores CEO de la década y, de nuevo, nos encontrábamos con el también famoso techo de cristal. Sólo dos nombres de mujer en tan magno ranking: María Dolores Dancausa, de Bankinter, y Christina Gut Revoredo, de Prosegur.
Que sólo el 4% de los integrantes de esta lista sea mujer no es una casualidad, sino una causalidad y, si algo tienen los datos, es que son crudos y hablan por sí mismos. De hecho, también el último informe de PwC titulado ‘La mujer directiva en España’ señalaba que únicamente el 5% de los puestos de responsabilidad más elevada en las empresas en España está ocupado por una mujer.
Este fenómeno, sin embargo, no tiene una correlación directa ni con lo que ocurre en las universidades ni con lo que ocurre en el mercado laboral. Según el último informe del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (correspondiente al curso académico 2018-2019), las estudiantes universitarias son más y mejores que los universitarios, terminando antes y con mejores notas esta etapa académica. Y, según la última EPA, del total de 8.812.300 de trabajadores con estudios superiores, 4,5 millones son mujeres frente al 4,2 de hombres.
¿Qué ocurre entonces cuando se trata de los puestos de mayor responsabilidad dentro de la empresa? ¿Por qué no es también mayor el número de mujeres que de hombres en la alta dirección?
El llamado techo de cristal trata de explicar una realidad que en nada tiene que ver con los méritos de cada persona. Metafóricamente, hace alusión a las barreras invisibles que impiden que la mujer pueda progresar en su entorno laboral y que, a veces, son tan patentes que hay ya quien ha rebautizado el término como “techo de cemento”, por lo duro que es precisamente de romper. Lo corroboran también los datos: en esta última EPA, en las categorías de directores y gerentes, el peso de los hombres duplica al de las mujeres (510.400 frente a 258.4000).
Son múltiples los factores que contribuyen a que esto ocurra, pero la maternidad, la falta de conciliación y una cultura dominada por los hombres en las compañías son, según el estudio de Grant Thornton ‘Women In Business 2019: hacia un avance real’, las causas principales que impiden el avance de la mujer en el mundo empresarial.
Ante esta situación, resulta imperativo que tanto los organismos públicos como los privados pongan en marcha medidas encaminadas a favorecer la igualdad real en los entornos laborales y que, además de una mayor flexibilidad horaria o la implantación del teletrabajo, lo único y exclusivamente importante sea el talento.