Cinco recomendaciones para celebrar el Día Internacional del Libro
Escrito por: Ana Maillo
“Para la mayor parte de la historia, Anónimo era una mujer”. Esta cita de Virginia Woolf es una crítica a la invisibilización que ha tenido la mujer en la literatura. Y puede que no haya mejor época para reivindicar a las autoras femeninas que en vísperas del Día Internacional del Libro, una cita imprescindible para todos los amantes de las letras pero que, desgraciadamente, también es un ejemplo más del silencio y borrado de las mujeres en la historia de la humanidad. ¿Sabéis por qué se celebra el 23 de abril? Porque justo alrededor de esta fecha murieron tres grandes de la literatura universal: Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega. Ninguna mujer, aunque las había.
Por fortuna, hay otras fechas del calendario que sí han puesto el acento en las escritoras. En Galicia, por ejemplo, el Día das Letras Galegas se celebra el 17 de mayo, fecha en la que se publicó en 1863 el primer ejemplar de Cantares gallegos, una de las obras cumbres de Rosalía de Castro.
En realidad, la instauración del Día Internacional del Libro tal y como hoy lo conocemos es bastante reciente: oficialmente, de acuerdo al reconocimiento y aprobación global otorgado por la UNESCO, data de 1995. Pero todo comenzó en España en 1926 cuando el rey Alfonso XIII aprobó y firmó el Real Decreto por el que se estipulaba que todos los años se conmemoraría el nacimiento de Miguel de Cervantes con una fiesta dedicada al libro. Entonces se creía que el autor de El Quijote había nacido un 7 de octubre y, durante 5 años, la fiesta se celebró tal día. En 1930, como consecuencia de las críticas de expertos que dudaban del día exacto del nacimiento de Cervantes, se trasladó al 23 de abril, fecha en la que se ha mantenido hasta la actualidad.
Aprovechando esta efeméride, desde Yo, Jefa hemos hecho una selección de libros por y para mujeres, con grandes historias que creemos imprescindibles. Esta es nuestra particular recomendación:
No es lugar para mujeres, de Wendy Moore
Estamos viviendo la peor crisis sanitaria de la historia reciente, quizás por eso es el mejor momento para recordar esta historia. Flora Murray y Louisa Garrett Anderson fueron dos doctoras británicas que lo dejaron todo cuando estalló la Primera Guerra Mundial ―incluyendo su lucha activa por el derecho al voto femenino― para trasladarse a Francia, donde crearon dos pequeños hospitales militares.
A pesar de que en su país las mujeres no podían atender a hombres, el talento de ambas para la medicina resultó ser tan impresionante que, en 1915, el Ministerio de la Guerra les pidió que regresaran a Londres y pusieran en marcha un nuevo hospital militar en un enorme y antiguo hospicio abandonado en Covent Garden. Allí crearon y dirigieron un hospital de 573 camas cuyo personal estaba formado exclusivamente por mujeres, recibiendo a 26.000 heridos y desarrollando técnicas completamente innovadoras.


El síndrome de la impostora, de Élisabeth Cadoche y Anne de Montarlot
En el podcast de Yo, Jefa Especial 8M: Mujeres y pandemia ya hablamos de este terrible síndrome. ¿Por qué las mujeres siguen sin creer en ellas mismas? ¿Por qué muchas mujeres sienten que son un fraude en su trabajo y que sus éxitos son solo fruto de la buena suerte?
Este libro ahonda en las causas psicológicas de este fenómeno e incluso explica cómo algunas grandes líderes como Michelle Obama, Angela Merkel o Margaret Atwood lo han sufrido. Además, da herramientas para aprender a creer en una misma y ganar la seguridad necesaria para tener una carrera profesional y personal exitosa.
De tal madre, tal empresa, de Sarah Lacy
Todavía hoy en día, aunque cueste creerlo, hay muchas empresas que siguen pensando que las mujeres que son madres rinden menos, están desconcentradas en su trabajo, se distraen en las preocupaciones de tener hijos a su cargo… Un estereotipo peligroso y totalmente equivocado, ya que las estadísticas demuestran todo lo contrario.
El techo de cristal o la brecha salarial son, entre otras muchas, las cuestiones abordadas por esta autora que, al convertirse en madre, descubrió que estaba “más centrada”. “Me volví más ambiciosa, más productiva. Y desarrollé ese súper poder que se llama empatía. No cambié. Seguí siendo la misma, pero para mejor”, explica.
Un alegato a favor de las madres trabajadoras que desmonta uno por uno todos los tópicos que han hecho creer a muchas mujeres que, si trabajaban, no serían buenas madres, y a muchos empresarios que, una madre, nunca sería una buena trabajadora.


El consentimiento, de Vanessa Springora
Este libro ha conmocionado al mundo. La autora denuncia en primera persona el abuso que sufrió con trece años por parte del conocido y mítico escritor Gabriel Matzneff, que tenía 51 e incluso había publicado ensayos y una serie de diarios donde narraba sus relaciones con niños de entre 9 y 15 años.
En palabras de Springora: “Es imposible separar la obra del hombre porque él siempre ha reivindicado sus libros como autobiográficos. ¿El artista está por encima de la ley? Si lo mismo hubiera pasado con un profesor de gimnasia nadie lo habría tolerado, pero con él sí porque había una visión francesa muy elitista de la literatura, que ponían por encima de la moral y la ley”.
En definitiva, una historia sobre el abuso sexual a menores y sobre una sociedad que mira hacia otro lado y tolera la pederastia.
Cómo acabar con la escritura de las mujeres, de Joanna Russ
Como os decíamos al comienzo de este post, a lo largo de la historia se ha ejercido una represión a la literatura escrita por mujeres, a veces de manera evidente, otras, con recursos menos visibles como prohibiciones informales (falta de recursos, falta de tiempo).
Hace solo tres años que este ensayo se tradujo al castellano, después de treinta y cinco años desde su publicación en 1983, y expone las estrategias sutiles, y no tan sutiles, que la sociedad usa para ignorar, condenar o menospreciar a las mujeres que producen literatura. Exhaustivo y a la vez lleno de sarcasmo, examina las fuerzas que sistemáticamente impiden un amplio reconocimiento del trabajo creativo de las mujeres.
